El separador rotatorio es el instrumento ideal para el tamizado de control y refinado, puesto que garantiza uniformidad en la granulometría y la ausencia de impurezas en el producto tratado.
Con frecuencia esta operación es necesaria justo antes del envasado del producto y esto implica necesariamente el respeto de dos parámetros fundamentales:
1) grado de tamizado óptimo;
2) elevado nivel de productividad.
El funcionamiento del separador rotatorio es muy sencillo. El producto entra en la boca de carga y, mediante un tornillo sinfín, se introduce en la cámara de tamizado, constituida por un cesto de red. Aquí, a través de la acción de barras rotatorias adecuadas, el producto entra en contacto con la red, por donde pasa la fracción "fina" que descargará la boca principal. En cambio se retienen las impurezas y, prosiguiendo el camino en el interior de la red, se transportan luego a la boca de descarga secundaria. La máquina de tamizado está dotada de enganches para el aire, también en la parte delantera y trasera, para mantener alejado el polvo de los cojinetes.
ERIMAKI fabrica el separador rotatorio en tres modelos, que se diferencian por dimensión y por lo tanto por capacidad productiva horaria, satisfaciendo así las diferentes exigencias del cliente. El material constructivo puede ser acero al carbono o acero inoxidable. A petición, este último puede tener un grado de acabado superficial con pulido con espejo.
El desmontaje de las partes internas del separador rotatorio es muy sencillo, agilizando así las operaciones de limpieza. Como ejemplo indicativo, abajo citamos algunos productos que se tratan normalmente para el tamizado con el separador rotatorio.